viernes, 4 de abril de 2014

Me duele la pierna

Me duele la pierna. Entendedlo como querais.

No quiero seguir corriendo para todo. Estoy muy frustado este año, está resultando un estrés a tiempo completo. En mi tiempo libre, sigo corriendo para todo. En mi vida privada, sigo corriendo para todo. ¿Sabéis qué es lo peor? Que no llego a tiempo a ningún sitio, por mucho que corra. Y no solo eso: cuando llego a un sitio, me hacen correr más para llegar al siguiente, también sin éxito. Y me empieza a doler la pierna del sobreesfuerzo.

El doctor House está cojo. Es un doctor cuya vida es miserable: no le ocurre nada bueno. Pero él ya no quiere que le ocurra nada bueno. Él solo quiere vivir la vida a su manera, dedicándose a lo que más le gusta, con su propia ética. Con sus normas. Él no vive a costa de lo que diga nadie, ni lo que piense, ni lo que intente imponerle. Es libre, y elige ser miserable. No ha elegido estar cojo; pero que más da.

He venido corriendo un tramo largo de camino. Me he decepcionado por algo, y me ha afectado mucho. Y pisaba muy fuerte por el camino. Me duele la pierna de verdad ahora mismo, por estúpido y por iluso.

Lo único que quiero es un descanso. Que deje de dolerme un rato. Que me de tiempo a recuperarme. Quiero olvidarme de mi dolor y de lo que lo causa, por mucho tiempo. Pero no va a poder ser porque necesito mi pierna ahora mismo.

Hoy no hay canción.